Con 25 años recién cumplidos y en un momento “completamente bisagra” donde ya la madurez toca la puerta, la banda española Vetusta Morla celebra su reencuentro con Latinoamérica tras una cruda pandemia y emprende en Uruguay el final de una gira teñida del “color” que el folclore da a su último disco. “Es muy buena pregunta saber cómo nos mantuvimos vivos y bien avenidos durante 25 años y algún día intentaremos contestarla y escribir un libro de autoayuda”, bromea Juan Manuel ‘Juanma’ Latorre. Es que, preguntado por cómo sobrevive la banda de hits como “Copenhague” y “Valiente” tras un cuarto de siglo, al guitarrista y teclista de Vetusta Morla -ese grupo de compañeros de instituto nacido en Madrid el 3 de octubre de 1998 y que este miércoles llena en Montevideo La Trastienda-, solo le surge una hipótesis. Un truco, una guarida “Yo creo que el único truco es seguir disfrutando de hacer música juntos, no tiene más. Somos una banda que estuvo nueve años componiendo canciones, agarrando la furgoneta y recorriendo España para tocar sin más expectativa que pasarlo bien y compartir nuestra música con las personas que quisieran venir a vernos”, revela Latorre. Según el músico, fue ese “tramo” el que sirvió para “blindarse” contra “egos, envidias o rencillas” y tanto las circunstancias adversas como las “propicias”, que a veces “acaban con los grupos”. “Cada vez que tenemos algún conflicto, algún momento de disyuntiva, que decae la cosa o que parece que no va tan bien nos refugiamos en esa guarida que es la de hacer música …










