Los deslices de Cuauhtémoc Blanco revelan una aparente desconexión con los problemas urgentes del pueblo que con su voto y confianza le han otorgado posiciones de poder que hoy por hoy le colocan en un banquillo de señalamientos. El salto que llevó a Cuauhtémoc Blanco del ídolo de masas pamboleras la figura política se muestra …
Pifias y desatinos en la cancha política de Cuauhtémoc Blanco

Los deslices de Cuauhtémoc Blanco revelan una aparente desconexión con los problemas urgentes del pueblo que con su voto y confianza le han otorgado posiciones de poder que hoy por hoy le colocan en un banquillo de señalamientos.
El salto que llevó a Cuauhtémoc Blanco del ídolo de masas pamboleras la figura política se muestra marcado por una cadena de fallos, deslices y penales no anotados.
Los escándalos se han convertido en una constante de la vida pública del representante morenista y exgobernador del estado de Morelos dichas pifias, cuestionan incluso la capacidad y compromiso de Blanco para mantener un espacio en la curul de la Cámara Baja.
Recientemente, como diputado federal de Morena, Cuauhtémoc Blanco fue exhibido en plena sesión virtual de la Comisión de Presupuesto, el exfutbolista se conectó brevemente, no para debatir un tema crucial como la Ley General de Aguas, sino para que le registraran asistencia, mientras de fondo se escuchaban claramente los sonidos de un partido de pádel: ‘Claramente se escuchan los raquetazos’, replicaron algunos de sus compañeros de Comisión.
El incidente fue visto como una falta de respeto y un desinterés flagrante por sus responsabilidades legislativas, desatando una oleada de críticas sobre el compromiso de los servidores públicos.
Ante la controversia, el morenista declaró que de existir una sanción ante su cuestionable proceder, la aceptará y pagará las multas correspondientes.
Sin embargo el incidente del juego de raqueta no ha sido el menor de los daños para Blanco pues sobre su persona pesa una acusación penal por presunto intento de agresión sexual contra su media hermana. Este hecho generó un infructífero intento de desafuero en la Cámara de Diputados.
Aunque el Congreso, en su mayoría de Morena, votó para proteger la inmunidad del exgobernador, este incidente de puso en el centro del debate el uso del fuero constitucional para blindar a políticos y causó la indignación tanto de colectivas feministas como de diversos sectores de la sociedad.
Por otra parte su gestión como gobernador, también ha sido cuestionada, diversas instituciones, incluida la Auditoría Superior de la Federación (ASF), han señalado un gasto irregular y desvíos de miles de millones de pesos en las arcas del gobierno de Morelos durante su mandato, es así que se investigan supuestas compras a empresas fantasma y licitaciones irregulares.
Estas irregularidades financieras marcan su administración con acusaciones de corrupción y malversación, acusaciones recurrentes desde su paso por la alcaldía de Cuernavaca.
Una raya más al ídolo de las canchas, llego cuando al cierre del 2022, siendo aún gobernador, decidió tomar un periodo vacacional en Brasil, mientras Morelos enfrentaba una severa crisis de violencia e inseguridad.
Otros señalamientos que cuestionan su capacidad se sustentan en las ocasiones en que el funcionario fue captado disfrutando de juegos de golf mientras que el estado a su cargo sufría por inundaciones.
Los deslices de Cuauhtémoc Blanco revelan una aparente desconexión con los problemas urgentes del pueblo que con su voto y confianza le han otorgado posiciones de poder que hoy por hoy le colocan en un banquillo de señalamientos y descontentos.






